domingo, 12 de febrero de 2012

Revancha

REVANCHA

Se dibuja una sonrisa mellada en la puerta giratoria y repite el mismo gesto en el espejo que preside la entrada y en el mostrador de aluminio de la cafetería. Una enfermera le conduce a una cabina donde se pone un camisón verde. Mientras contempla por última vez su rostro en la tarjeta de identidad, Salvatore solo piensa en dejar atrás en este quirófano clandestino los rasgos y huellas del monstruo para salir en busca del hijo puta de uniforme que le reventó de un disparo la boca.